Tesoros
de la Palabra
Judá, el verdadero Hijo Pródigo
La parábola del hijo pródigo, como todas las parábolas, es la narración de un suceso ficticio que, por comparación o analogía, nos lleva a una enseñanza práctica de la vida; pero que obviamente está inspirada en hechos reales. En un análisis rápido de la vida de Judá, el cuarto hijo de Jacob, podemos ver que la parábola del hijo pródigo fácilmente puede ser la historia de Judá, el verdadero hijo pródigo, quien al estar lejos de su padre y encubriendo su pecado, solo halló dolor y sufrimiento, y solo fue restaurado hasta el día que decidió volver a la casa de su padre y decirle: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti.
Estatua de sal o enemiga de Dios
El relato de la mujer de Lot mirando atrás y convirtiéndose en una "estatua de sal" plantea una reflexión profunda sobre el apego al pasado y la resistencia al cambio. Más que una transformación literal en sal, podría simbolizar su fijación en lo que dejaba atrás, sembrando maldición en lugar de avanzar hacia la voluntad de Dios. Su ejemplo nos advierte sobre las consecuencias de aferrarnos al pasado en lugar de seguir adelante en obediencia.
¿Pesebre o Tabernáculo?
La Navidad debería recordar la Fiesta de los Tabernáculos, que marca el nacimiento de Jesús según el calendario judío. En lugar de enfocarse en el pesebre tradicional, esta festividad resalta la presencia de Dios entre su pueblo, representada por el concepto de "Skenoo", que significa levantar un tabernáculo.
Balaam, estratega de las tinieblas
Balaam, un falso profeta contratado por los moabitas para maldecir a Israel, comprendió que no podía ir contra el pueblo de Dios. Aunque no logró maldecirlos directamente, incitó a Israel a la desobediencia y la idolatría, lo que provocó el juicio divino sobre ellos.
Los Otoniel de hoy
Otoniel, el primer juez de Israel, simboliza la valentía y la persistencia en la adversidad. Hoy, como entonces, hay muchos Otonieles anónimos, forjados en las batallas de la vida, listos para ser instrumentos de paz y bendición en sus comunidades. Su coraje y fe marcarán la diferencia, aunque su nombre pueda pasar desapercibido para el mundo.